Si un auto no enciende su motor, no podrá avanzar y quedará sujeto a las condiciones externas para moverse. Esto nos sucede también a los seres humanos. Debemos arrancar nuestro motor, echarlo a andar para moveremos por nuestra cuenta, sino estaremos sujetos a que nos lleven y para donde quieran llevarnos.
Es relevante echar a andar nuestro motor para lograr avanzar a los lugares que queremos ir. Es el principio de la responsabilidad, en la que uno es responsable de obtener lo que necesita para triunfar y no puede culpar a nadie distinto de uno mismo por lo que le pasa.
En la literatura ha sido tratado extensamente y de diferentes puntos de vistas, porque es una dimensión muy relevante para no pasar nuestra vida “flotando” y dejándonos llevar por la corriente de los ríos de la vida.
Un cuento que refleja lo señalado es el siguiente (1):
Un supervisor visitó una escuela primaria. En su recorrido observó algo que le llamó poderosamente la atención: una maestra estaba atrincherada atrás de su escritorio, los alumnos estaban en desorden; el cuadro era caótico.
Decidió presentarse:
- Permiso, soy el supervisor de turno… ¿algún problema?.
- Estoy abrumada señor, no se qué hacer con estos niños… El ministerio no me manda material didáctico, no tengo nada nuevo que mostrarles ni qué decirles…
El supervisor, que era un docente del alma, vio un corcho en el desordenado escritorio. Lo cogió y con aplomo se dirigió a los chicos:
- ¿Qué es esto?
- Un corcho señor… gritaron los alumnos sorprendidos.
- Bien, ¿De dónde sale el corcho?
- De la botella señor. Lo coloca una máquina…, sale de un árbol…. de la madera…, respondían animosos los niños.
- ¿Y qué se puede hacer con madera?, continuaba entusiasta el docente.
- Sillas…, una mesa…, un barco…
- Bien, tenemos un barco. ¿Quién lo dibuja? ¿Quién hace un mapa en la pizarra y coloca el puerto más cercano para nuestro barquito? ¿A qué país corresponde? ¿Qué poeta conocen que nació allí? ¿Qué produce esta región? ¿Alguien recuerda una canción de este lugar? Y comenzó una tarea de geografía, de historia, de música, economía, literatura, religión, etc.
La maestra quedó impresionada. Al terminar la clase le dijo conmovida:
- Señor, nunca olvidaré lo que me enseñó hoy. Muchas Gracias.
Pasó el tiempo. El supervisor volvió a la escuela y buscó a la maestra. Cual sería su sorpresa al encontrarla nuevamente acurrucada detrás de su escritorio, los alumnos otra vez en total desorden…
- Señorita… ¿Qué pasó? ¿No se acuerda de mí?
- Sí señor, ¡cómo olvidarme!. Qué suerte que volvió. No encuentro el corcho ¿Dónde lo dejó?
Grandes pensadores y escritores han escrito sobre el tema:
Antón Chejov (1860-1904) - Narrador y Dramaturgo Ruso, “Un hombre es lo que él cree que es” (2).
Alexander Graham Bell (1847-1922) - Inventor Estadounidense, “Por regla general, un hombre debe muy poco a aquello con lo que nace; un hombre es lo que él hace de si mismo” (3).
André Maurois (1885-1967) - Novelista y Ensayista Francés, “El primer deber del hombre es desarrollar todo lo que posee, todo aquello en que él mismo pueda convertirse” (4).
Disponemos de la materia prima, tenemos todos los elementos, pero debemos hacer contacto para poder encender nuestro motor y avanzar a dónde hemos definido llegar. Podemos arrastrarnos, caminar, correr o volar, pero siempre el primer paso será responsabilidad de cada uno y de nadie más.
Referencia :
(1) Adaptación de cuento citado en :
http://planocreativo.wordpress.com/2009/07/30/chiste-sobre-la-creatividad-en-la-ensenanza/, Consultado el 29-Mar-2010.
(2) Citado en: Aléx Rovira, "La brújula Interior", Ediciones URANO, Barcelona, España, 8va.Edición, 2005, pp85."
(3) Citado en: Brian Tracy, "Metas", Ediciones Urano, S.A., Barcelona, España, pp33.
(4) Citado en: Frase del día - Proverbia.net, martes, 11 de julio de 2006
Es relevante echar a andar nuestro motor para lograr avanzar a los lugares que queremos ir. Es el principio de la responsabilidad, en la que uno es responsable de obtener lo que necesita para triunfar y no puede culpar a nadie distinto de uno mismo por lo que le pasa.
En la literatura ha sido tratado extensamente y de diferentes puntos de vistas, porque es una dimensión muy relevante para no pasar nuestra vida “flotando” y dejándonos llevar por la corriente de los ríos de la vida.
Un cuento que refleja lo señalado es el siguiente (1):
Un supervisor visitó una escuela primaria. En su recorrido observó algo que le llamó poderosamente la atención: una maestra estaba atrincherada atrás de su escritorio, los alumnos estaban en desorden; el cuadro era caótico.
Decidió presentarse:
- Permiso, soy el supervisor de turno… ¿algún problema?.
- Estoy abrumada señor, no se qué hacer con estos niños… El ministerio no me manda material didáctico, no tengo nada nuevo que mostrarles ni qué decirles…
El supervisor, que era un docente del alma, vio un corcho en el desordenado escritorio. Lo cogió y con aplomo se dirigió a los chicos:
- ¿Qué es esto?
- Un corcho señor… gritaron los alumnos sorprendidos.
- Bien, ¿De dónde sale el corcho?
- De la botella señor. Lo coloca una máquina…, sale de un árbol…. de la madera…, respondían animosos los niños.
- ¿Y qué se puede hacer con madera?, continuaba entusiasta el docente.
- Sillas…, una mesa…, un barco…
- Bien, tenemos un barco. ¿Quién lo dibuja? ¿Quién hace un mapa en la pizarra y coloca el puerto más cercano para nuestro barquito? ¿A qué país corresponde? ¿Qué poeta conocen que nació allí? ¿Qué produce esta región? ¿Alguien recuerda una canción de este lugar? Y comenzó una tarea de geografía, de historia, de música, economía, literatura, religión, etc.
La maestra quedó impresionada. Al terminar la clase le dijo conmovida:
- Señor, nunca olvidaré lo que me enseñó hoy. Muchas Gracias.
Pasó el tiempo. El supervisor volvió a la escuela y buscó a la maestra. Cual sería su sorpresa al encontrarla nuevamente acurrucada detrás de su escritorio, los alumnos otra vez en total desorden…
- Señorita… ¿Qué pasó? ¿No se acuerda de mí?
- Sí señor, ¡cómo olvidarme!. Qué suerte que volvió. No encuentro el corcho ¿Dónde lo dejó?
Grandes pensadores y escritores han escrito sobre el tema:
Antón Chejov (1860-1904) - Narrador y Dramaturgo Ruso, “Un hombre es lo que él cree que es” (2).
Alexander Graham Bell (1847-1922) - Inventor Estadounidense, “Por regla general, un hombre debe muy poco a aquello con lo que nace; un hombre es lo que él hace de si mismo” (3).
André Maurois (1885-1967) - Novelista y Ensayista Francés, “El primer deber del hombre es desarrollar todo lo que posee, todo aquello en que él mismo pueda convertirse” (4).
Disponemos de la materia prima, tenemos todos los elementos, pero debemos hacer contacto para poder encender nuestro motor y avanzar a dónde hemos definido llegar. Podemos arrastrarnos, caminar, correr o volar, pero siempre el primer paso será responsabilidad de cada uno y de nadie más.
Referencia :
(1) Adaptación de cuento citado en :
http://planocreativo.wordpress.com/2009/07/30/chiste-sobre-la-creatividad-en-la-ensenanza/, Consultado el 29-Mar-2010.
(2) Citado en: Aléx Rovira, "La brújula Interior", Ediciones URANO, Barcelona, España, 8va.Edición, 2005, pp85."
(3) Citado en: Brian Tracy, "Metas", Ediciones Urano, S.A., Barcelona, España, pp33.
(4) Citado en: Frase del día - Proverbia.net, martes, 11 de julio de 2006
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