¡Oh!. ¡Que maravilloso es el espíritu cooperativo!. Graznada muy entusiasmado el ganso, al ver la “montaña” de mensajes recibidos.
El letrero si había dado resultado, reflejado por el gran número de mensajes con variadas ideas, e incluso en algunos casos con propuestas concretas de ofrecimientos para resolver las dificultades y así poder retornar o lograr nuevas formas de tener ese clima de armonía que toda la comunidad anhelaba.
Todos con gran entusiasmados y con esa “música” natural de las animadas conversaciones de la comunidad, iniciaron la revisión de cada uno de los mensajes. Se encontraron que las ideas si bien muy distintas y dispares, la gran mayoría quedaba clasificada en tres categorías. Las primeras, las ideas más vanguardistas y audaces indicaban la necesidad de contratar a los consultores que hoy estaban considerados como los “gurú” en sus disciplinas. Las segundas, de ideas algo más conservadoras aconsejaban seguir los lineamientos de los autores clásicos de administración. Y las terceras, reflejaban ideas más filosóficas y orientadas a la búsqueda de los principios eternos y enseñanzas siempre vigentes contenidas en la Biblia.
La opinión común de los participantes era que todas las ideas aportadas ofrecían interesantes ventajas, pero también intuían que alguna de éstas generaría más de algún inconveniente no deseado.
El proceso de revisión dejó maravillado a todos, y una de las primeras conclusiones fue el hacer evidente el poder del pedir, que siempre da como resultado el recibir. A su vez, lo espectacular de la aparición casi mágica de nuevas ideas con el sólo hecho de leer las recibidas.
Por lo contentos y encantados que estaban no percibieron que trabajaban día tras día y el tiempo pasaba y pasaba. Indudablemente estaban consciente de obtener un resultado que entregara los mejores beneficios y poder expresarlos lo más fácil, objetiva y sencillo posible, para así mejorar la comprensión y el consenso de toda la comunidad.
De las entretenidas, y a veces candentes, y largas jornadas de conversaciones, argumentaciones y revisiones de las opiniones sobre las ventajas e inconvenientes de cada una de las opciones, se inclinaron por la propuesta entregada por el búho, que para todos por tradición y por historia es el ave que más lee y siempre dedicado al estudio sobre variados temas, principalmente sobre el comportamiento de los pájaros.
La propuesta fue expuesta a toda la comunidad y rápidamente se detectó que todos estaban de acuerdo, atribuible a las emocionantes y entretenidas jornadas de participación, y por su puesto al gran tiempo dedicado a la revisión de cada una de las opciones.
¿Cuál cree usted que fue la propuesta entregada por el búho?
El letrero si había dado resultado, reflejado por el gran número de mensajes con variadas ideas, e incluso en algunos casos con propuestas concretas de ofrecimientos para resolver las dificultades y así poder retornar o lograr nuevas formas de tener ese clima de armonía que toda la comunidad anhelaba.
Todos con gran entusiasmados y con esa “música” natural de las animadas conversaciones de la comunidad, iniciaron la revisión de cada uno de los mensajes. Se encontraron que las ideas si bien muy distintas y dispares, la gran mayoría quedaba clasificada en tres categorías. Las primeras, las ideas más vanguardistas y audaces indicaban la necesidad de contratar a los consultores que hoy estaban considerados como los “gurú” en sus disciplinas. Las segundas, de ideas algo más conservadoras aconsejaban seguir los lineamientos de los autores clásicos de administración. Y las terceras, reflejaban ideas más filosóficas y orientadas a la búsqueda de los principios eternos y enseñanzas siempre vigentes contenidas en la Biblia.
La opinión común de los participantes era que todas las ideas aportadas ofrecían interesantes ventajas, pero también intuían que alguna de éstas generaría más de algún inconveniente no deseado.
El proceso de revisión dejó maravillado a todos, y una de las primeras conclusiones fue el hacer evidente el poder del pedir, que siempre da como resultado el recibir. A su vez, lo espectacular de la aparición casi mágica de nuevas ideas con el sólo hecho de leer las recibidas.
Por lo contentos y encantados que estaban no percibieron que trabajaban día tras día y el tiempo pasaba y pasaba. Indudablemente estaban consciente de obtener un resultado que entregara los mejores beneficios y poder expresarlos lo más fácil, objetiva y sencillo posible, para así mejorar la comprensión y el consenso de toda la comunidad.
De las entretenidas, y a veces candentes, y largas jornadas de conversaciones, argumentaciones y revisiones de las opiniones sobre las ventajas e inconvenientes de cada una de las opciones, se inclinaron por la propuesta entregada por el búho, que para todos por tradición y por historia es el ave que más lee y siempre dedicado al estudio sobre variados temas, principalmente sobre el comportamiento de los pájaros.
La propuesta fue expuesta a toda la comunidad y rápidamente se detectó que todos estaban de acuerdo, atribuible a las emocionantes y entretenidas jornadas de participación, y por su puesto al gran tiempo dedicado a la revisión de cada una de las opciones.
¿Cuál cree usted que fue la propuesta entregada por el búho?
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