domingo, 28 de junio de 2009

P11 - El Viaje - Los Factores Críticos del Éxito


No saben la alegría de todos cuando el Comandante nos invitó a la cabina de la nave, un lugar muy especial en el que se controla todo el comportamiento y se asegura el destino revisando segundo a segundo el avance de la nave. Como se lo imaginarán es una parte muy singular, donde todo está en su lugar y cada lugar tiene un propósito, más bien cada lugar tiene un instrumento que tiene un objetivo específico. Para que decir de la vista panorámica espectacular que se logra en este lugar. Todos estábamos extasiados y sorprendido con las explicaciones que nos daba el Comandante. La verdad el sólo ver el lugar daban ganas de asumir el liderazgo de la nave, para disfrutar del privilegio de esa vista maravillosa.

Una vez revisada la cabina y nuestro Comandante nos dio respuestas a cada un de las infinidades de preguntas, que denotaban nuestra curiosidad y poco conocimiento de lo que significaba un lugar como el que habíamos visitado, sobre todo de la relevancia que tiene para llevar la nave al destino definido, retornamos a nuestro lugar habitual. Todos muy contentos, entusiasmados y muy estimulados con las maravillas que habíamos visto.

Cuando estábamos ya en nuestra posiciones, nuestro Comandante nos mencionó que en un viaje las naves están un porcentaje importante del tiempo (alrededor del 80 %) fuera de la ruta de navegación, y que existen dos condiciones principales que los hacen llegar a sus destinos; primero el saber a dónde ir y segundo el monitorear en forma continua algunos de los instrumentos clave de la nave para corregir las condiciones de vuelo y así avanzar hacia el objetivo final. De no hacerlo la nave se perdería en el espacio y no llegaría nunca a su destino. Por eso, nos explicó, es que habíamos visitado la cabina y el porque de la importancia de mostrarnos los instrumentos. Los comandantes o pilotos o líderes del vuelo están continuamente monitoreando algunos de los instrumentos, los que entregan los antecedentes esenciales para asegurar el tener éxito en llevar la nave al destino deseado.

En término generales, nos relató: cuando mencionamos la revisión continua de algunos de los instrumentos, estamos hablando de los FACTORES CRÍTICOS DE ÉXITO del viaje, que son aquellos pocos elementos que debemos poner atención continuamente y que nos indican si nuestro viaje está en el camino correcto. Son aquellas pocas cosas que siempre debemos estar vigilando para tener éxito en la misión.

Los factores críticos de éxito, continuó, son algunos de los tantos instrumentos de control de la nave. Son pocos pero están midiendo e indicando aquellas variables críticas para el logro de los objetivos y que se deben estar vigilando continuamente con el propósito de poder realizar oportunamente los cambios correctivos, para asegurar que la nave se dirija hacia la visión definida.

domingo, 14 de junio de 2009

P10 - El Viaje - Las Estrategias


El viaje continuaba y cada día se presentaba con nuevas sorpresas y con fantásticas propuestas, siendo la del aprendizaje sobre la misión la más espectacular. Algunos de los integrantes se hacían preguntas del porque tanta maravilla. La respuesta de nuestro Comandante no se dejó de esperar, y en forma muy breve, sencilla y algo misterioso nos expresó: Es parte de la estrategia de viaje. Todos quedamos esperando más explicación, porque no comprendíamos del todo a lo que se refería.

Cuando se escucha la palabra estrategia, nos mencionó, lo primero que se nos viene a la cabeza es la imagen de la guerra. Las estrategias de los guerreros. Hoy también se hace cada vez más común en los deportes escuchar la palabra estrategia. En los encuentros de fútbol, se comenta sobre la estrategia de los entrenadores que llevaron a la victoria a sus equipos.

Debemos aclarar, enfatizó, que en todas las situaciones que se requiera hacer algo se plantean estrategias. De alguna manera la ESTRATEGIA va asociado a la forma como se llevan a cabo las cosas. Y en nuestro viaje no es la excepción, es común platearlas, y es más, es necesario definirlas, con el propósito de buscar aquellos caminos que en forma más efectiva nos lleven al destino deseado.

Con un tono más reflexivo, indicó: ¿Cuál será la ruta que seguiremos en nuestro viaje?, ¿Qué caminos tomaremos?, ¿La ruta directa será el mejor camino?, etc. Cuando pensamos en estas interrogantes, estamos pensando en nuestras estrategias. Siempre hay más de una manera de hacer las cosas, por lo que se debemos recurrir a nuestra imaginación para plantearlas y así poder elegir cual de las maneras es la mejor para realizar nuestro viaje.

Con una postura de intelectual, nos comentó: Pueden existir variadas maneras de hacer el viaje, por lo que debemos llevar a cabo la selección de la mejor forma, debemos hacer los esfuerzos de elegir las mejores estrategias.

Posesionándose de su condición de Comandante, conocedor de todos los aspectos técnicos de la nave, nos manifestó: Si nuestra estrategia es la de ahorro de combustible, seguramente debemos viaje a las condiciones que nos permitan el ahorro respectivo. Quizás a una velocidad determinada en la que se haya demostrado que se obtenga el mejor rendimiento de los motores de la nave. Se pueden pensar muchas otras, como el de llegar lo más rápidamente, hacer el viaje con el máximo de seguridad, etc. Lo importante es que podemos “echar a volar” nuestra fértil imaginación para generar variadas alternativas que nos permitan seleccionar las mejores.
Con un sentido de visión global concluyó: Indudablemente cada una de las estrategias y en su conjunto deben tener una razón de ser y deben estar integradas como un todo en los demás elementos de la misión.

domingo, 7 de junio de 2009

P09 - El Viaje - Los Desafios


Los encantos de volar estaban acompañados con las emociones de la aventura, pero en nuestro caso también se complementaban con lo fantástico de aprender de la naturaleza de los viajes, sobre todo recordando que en ésta vida sólo somos peregrinos.

Nuestro comandante llegó nuevamente a la cita, siempre con esa vitalidad y energía que eran contagiosos. Se sentó en su butaca habitual e inicio su siempre amena y atrayente charla.

Una vez que se sabe para donde ir y se tiene estabilizada la nave, comentó, se puede avanzar a toda máquina hacia el destino definido. El tener éstas condiciones es lo que hace posible que podamos pensar en avanzar a toda velocidad.

Haciendo una pausa, continuó: Para avanzar debemos ocuparnos del sistema de propulsión de la nave, y las preguntas obvias que nos hacemos son: ¿Cómo avanzamos a la máxima velocidad?, ¿Cómo logramos el mejor sistema de propulsión?. Para dar respuesta a estas interrogantes es que recurrimos a los desafíos.

Los DESAFIOS, sentenció, son aquellas actividades relevantes que debemos llevar a cabo y que estamos convencido que son las que más contribuyen a que nuestra aventura llegue al fin deseado. Los desafíos son como el sistema de propulsión de la nave, y la magia es que al determinar las actividades relevantes es como encontrar el mejor combustible para obtener la mejor energía que nos permitan impulsar nuestra nave hacia los objetivos deseados definidos.

Es importante hacer notar, manifestó, que la definición de los desafíos es clave, porque nos permitirá que avancemos más rápido hacia nuestros objetivos.

Con mucho énfasis, nos dijo: Los desafíos deben tener una característica básica y que le da su nombre. Deben ser desafiantes. Me gusta la definición que indica que los desafíos tienen que intimidar un poco pero deben emocionar mucho. Deben dar algo de temor de no lograrlos, pero deben ser superados por los grandes deseos de llevarlos a cabo. Podríamos decir que son aquellos proyectos que no son parte de las actividades rutinarias, y que se consideran los que más contribuyen a que la nave avance a toda velocidad hacia el destino definido.

Con su mejor elocuencia mencionó: Los desafíos son el combustible, pero hay que recordar que el avance depende también de la capacidad del motor de la nave. Un buen combustible permitirá que la nave avance más rápidamente. A su máxima velocidad con el mejor combustible seleccionado y a toda máquina de acuerdo a su capacidad.

Muy entusiasmado y con algo de humor acotó: Con el mejor combustible se logrará sacar su mejor rendimiento. Pero teniendo presente que no se logrará hacer crecer el motor.

Sucede algo similar con los desafíos, concluyó, si se llevan a cabo los más relevantes, se logrará el mejor rendimiento y por lo tanto la mejor propulsión que permitirá hacer avanzar la misión hacia la visión definida. Nuestra tarea por lo tanto es hacer todos los esfuerzos para encontrar aquellos desafíos que más contribuyan que la nave pueda avanzar a toda máquina.